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Las palabras que dejó el viento

Me atrapa el tiempo en palabras no dichas
y en sueños dejados por la mitad.
Pido perdón por las faltas, nunca supe gritar
y aunque no tenía miedo no te supe salvar.

Me abandona la duda
pero sé que no me quieres escuchar.
El problema es que me toca cantarte lo que siento,
ahora es demasiado tarde para detener este intento.

Soy ráfaga, soy tormenta,
alguna vez fui lluvia y viento,
ahora no tengo excusas para no explotar.

Soy el decreto de la verdad
y arrancaré las piedras que me pongas en el medio.

Nadie más volverá a callar.
Me atravieso en la puerta,
de aquí no te vas sin antes escuchar.

Escuchando “Hablar por hablar” Luis Ramiro

Comentarios

  1. ¡Excelente poesía! Espero tu visita en mi blog, ¡gracias!

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  2. Hermoso, con decisión y un mensaje claro. me ha fascinado la fuerza de este poema.Mil besos!!

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  3. Nos ha gustado tu blog, nos gustaria que dieras de alta tu web en nuestro directorio de blogs www.directorioguia.es ; Saludos

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Sin tristeza, sin pena, sin dolor... con coraje.

Volver a empezar, juntando las piezas que no encajaban antes y encontrando nuevas, viendo el conjunto de lo que queda, recobrar la esperanza en el final, que es ante todo un principio. Sin tristeza, sin pena, sin dolor... con coraje. Todo comienzo es un final, un dejar atrás a algo o a alguien, y eso sorprende porque uno quisiera llevarse todo puesto o mandarlo todo muy lejos. A veces para que no duela me olvido, a veces para que no duela me acuerdo y aveces me quedo, no me voy. La cuestión es que debo partir, es hora, es mi hora. Simplemente lo sé, esas cosas uno las siente adentro, como si se muriera un poquito para luego estar más fuertes y amar más puramente, de forma más madura, actuar de modo más coherente, más consecuentemente. Volver a empezar, por otro camino, no olvidando jamás lo que fuimos, teniendo siempre presente lo que queremos y sabiendo quienes somos.

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