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Mostrando entradas de febrero, 2012

Uno

Y tempraño llegará la Luna para apoyar su cabeza en el pecho más bonito del mundo cálido aroma de Sol sobre la corriente del río. Y mañana se levantará la Luna sobre el reflejo del Sol en el río baño tibio de pureza y cariño que adora su recorrido. Y la Luna se irá a tiempo en el perfecto momento del embrujo del Sol donde duerme el espejo de su corazón al acariciar cada amanecer los rayos de su ser y su amor.

Tres toques

Pum pum pum corazón de tres latidos y falta de respiración, latidos caídos en la tentación de dejar de latir... Pum pum pum corazón perdido que emite ruidos para reencontrar su camino y volver a sentirse vivo... Pum pum pum corazón fallido, que toca tres veces la puerta y sale rapidito... Pum pum pum corazón comprometido que aunque cansado y malhumorado repite sonidos como eco mientras se queda dormido.

Respira

Hoy me duele respirar, casi no puedo, casi no quiero. Hoy me marea despertar, abrir los ojos y mirar. Las manos van, las piernas siguen, cabeza de péndulo que se agota entre las botas de la interminable calzada. Los pies andan, los brazos simulan, nariz que sospecha el agua entre los sabores de la tierra cansada. Las uñas sangran, los dedos lloran, venas que se acuerdan de las notas que preguntaban por la guitarra rota después de veintitrés días. Las rodillas hablan, retuercen las muñecas, articulaciones no comunes a la hora de tocar personas. Hoy me duele recordar, me marea pensar, las cosas que provoca soñar entre las paredes de la enfermedad pueden ser tan variadas como la esperanza de volver a caminar.

Cerradura

Blindada, acojonada, puerta de madera forzada a estar con cerraduras perfumadas de temor escenificado en el alma. Blindada, acomplejada por la combinada apariencia segura que dan las cuatro vueltas y media de la cerradura mojada. Blindada, desafiante a la entrada de extraños seres purpúreos que un día intentarán arrancar la madera o acariciar  con llaves maestras el pasillo de esperada presencia. Blindada, puerta de malvenida ocasión que nadie desea, que todos esperan que yo desespero si he olvidado trancarla.

Biblioteca

Entre libros, discos y pensadores, pedazos de mundo, retazos de sueños y esperanzas, palpitan parecido a un hombre o a una mujer encontrados en su aroma y forma de ser, en su espíritu y esencia, desde un principio sin un final. Entre hojas, papeles y plástico, textos envueltos de fe, escriben, componen para alguien, así es los que crean y creen en un mundo mejor. Relatar por relatar no es existir, poemizar es una forma de sobrevivir. Entre las letras que descubrí me sentí un poco más viva pero en ese instante supe que tenía miedo de partir una vez fuera de la biblioteca ¿sería capaz de resistir? Humana entre ideas, entre personas que ahora son personajes estigmatizados como genios trozos de lo que hay allí fuera y me entristece mirar pues sé que humana entre acciones significa reaccionar y sólo vine para despertar de la pesadilla sólo vine para tener otras posibilidades y no tener que volver a pelear pues quiero ser humana entre humanos, simplemente rode

Taza de chocolate

Late la taza, taza de chocolate. Calor que nace en las tripas de la tristeza. Agobio, cansancio y pobreza todo gira en la misma ruleta. Late la taza, taza de chocolate. Trae fuerzas a la nobleza, devuelve esperanza a la pereza. Cuidado con las trazas negras que darán aun más fortaleza. Late la taza, taza de chocolate. Yo tenía una certeza, ahora quiero la confianza.

En ti

En el pedazo de Luna que esa vez conocí. En el regazo de Sol donde anoche dormí. En el puente sobre el río, en la piedra, el agua y el molino, en la esquina a unos metros y en aquel árbol tupido que se declaró cupido cuando tocaste mi mano. En la vereda de enfrente camino a casa, en las escaleras del portal, yo me acuerdo de tu abrazo para no dejarme escapar. En el paseo al atardecer, en la siesta después de comer, en tu sonrisa en el coche, en mis ganas de volver, de estar contigo siempre y no saber como hacer. En el papel, en las notas, en el teclado, en la pantalla, en el teléfono, en la cama... Cierro los ojos y allí me miras, hermosa mirada que me cautiva. Estás en todos los sitios, en todas las cosas... Pienso en ti, siento en ti y en mi ¡Cómo te quiero! Es algo que con palabras no alcanzo a describir.

Mi cama sin usted

Sin usted no hay descanso, la fatiga se acumula, la manta no respira inútil la pregunta después de una noche sin Luna. Sin usted no hay encanto, las sábanas no cubren, el frío se entromete y cada cuatro segundos el Sol arremete contra las persianas recordando que son más de las siete. Sin usted no hay canto, el colchón está duro, no suenan los resortes, no hay ruido en su mundo y yo, yo le espero disimulando que mi cama es un sitio para estar durmiendo.