Llevo una corona de sueños en la cabeza
ya sabes que no soy princesa
ni pertenezco a la realeza.
Cae nieve y miro al cielo con delicadeza
abro mi mano para recibirla.
Ella primero se despereza y luego se acomoda
entre las líneas más gruesas de mi palma.
Se calienta, me enfría
pero yo la siento como una caricia.
Llevo un aro pesado que se enreda
entre mis cabellos blancos.
No entiendo de monotonía ni de espasmos
me gusta la melodía que moja los pastos,
me preocupa la que los inunda.
ya sabes que no soy princesa
ni pertenezco a la realeza.
Cae nieve y miro al cielo con delicadeza
abro mi mano para recibirla.
Ella primero se despereza y luego se acomoda
entre las líneas más gruesas de mi palma.
Se calienta, me enfría
pero yo la siento como una caricia.
Llevo un aro pesado que se enreda
entre mis cabellos blancos.
No entiendo de monotonía ni de espasmos
me gusta la melodía que moja los pastos,
me preocupa la que los inunda.
Cierro mi mano con fuerza
la nieve que parecía arena
queda dura, espesa.
La dejo libre, es bella
pura por naturaleza,
no es de mi pertenencia.
Reniego de mi pobreza,
soy millonaria porque tengo amor.
No necesito ser alteza,
sólo flor.
la nieve que parecía arena
queda dura, espesa.
La dejo libre, es bella
pura por naturaleza,
no es de mi pertenencia.
Reniego de mi pobreza,
soy millonaria porque tengo amor.
No necesito ser alteza,
sólo flor.
El amor es de las pocas cosas que se merece una saturación de adjetivos..
ResponderEliminarTe voy leyendo,
Salud!