Planifica, sí, poco a poco, paso a paso... Suéñalo, abraza ese sueño, camínalo, vívelo, cuida su forma y su fondo, su trayecto, su textura, su entorno y cuida también elegir a las personas que lo transitan contigo. Planifica, sí, huele el aroma de ese sueño, tócalo con las manos y los ojos, inspira el aire y prueba su sabor con las papilas gustativas de tu boca invita a tu alma a sentir ese amor. Planifica, sí, como se planifica el canto de los pájaros, el ondear de las olas, el balanceo de los árboles, y el maullido del gato que te mira, te saluda y te pide caricias. Planifica, sí, planifica disfrutar de cada instante que la vida te regala. Planifica, sí, planifica vivir más seguido. A Raquel M.